Practicar ‘mindfulness’ y ‘mindtraining’ desactiva las regiones cerebrales involucradas en la red neuronal por defecto y reduce la probabilidad de desarrollar Alzheimer, según han informado expertos del centro Denken.
En concreto, los entrenamientos de ‘mindfulness’ para mayores, en los que se aplican técnicas para la meditación y relajación basadas en la atención a la respiración y observación consciente, sirven para lograr una reducción notable del estrés y la ansiedad. Con ello también se reducen los niveles de cortisol, hormona segregada como respuesta al estrés que afecta al sistema inmunológico e incrementa el nivel de azúcar, y mejora muchos aspectos de la función mental.
“Los ejercicios que se proponen en los programas de ‘mindfulness’ y ‘mindtrainig’ para mayores de edad están orientados primero a la relajación y recuperación del control mental, y posteriormente al desarrollo interactivo de las áreas cognitivas con el fin de reforzar aquellos aspectos necesarios para la prevención en el caso de enfermedades como el Alzheimer. Se realizan evaluaciones constantes antes, durante y después para conocer los progresos y las metas”, ha comentado el director del Centro Denken, Italo Maione.
‘MINDTRAINING’ PARA MANTENER LA RESERVA MENTAL
Por otro lado, con el ‘mindtraining’ lo que se pretende en este colectivo es restablecer el capital mental y la reserva cognitiva, entrenando la memoria, capacidades ejecutivas, atención, entre otros. El objetivo es mantener la reserva mental impidiendo su declive y la prevención del deterioro cognitivo, potenciando las habilidades mentales para retrasar las consecuencias naturales del envejecimiento. Dedicar cada día 20 minutos a entrenar la mente con este tipo de ejercicios reduce la probabilidad de desarrollar Alzheimer.
“Tras un diagnóstico integral en el que se evalúa el estado de las habilidades cognitivas personales se establece el entrenamiento que se necesita por áreas como orientación, memoria, atención o memoria remota. Para la prevención orientada al Alzheimer existen ejercicios interactivos específicos para cada una de las áreas intervinientes en el desarrollo de la enfermedad. Combinado con el entrenamiento de ‘mindfulness’ logramos un estado óptimo de prevención en edades senior”, ha apostillado Maione.
Finalmente, el experto ha destacado la necesidad de realizar una evaluación geriátrica que permita identificar las áreas sobre las que realizar ejercicios específicos que sirvan para potenciar la prevención.
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Fuente: www.psiquiatria.com